Unas conversaciones sobre Longarón, su maestría y lo poco (y mal) publicado que está por aquí, acontecidas en Facebook (sí, el feibú también sirve para cosas trascendentes, además de para colgar fotos de los platos que te vas a comer y de la farra del último finde) me han arrastrado a buscar arte del maestro y a realizar este Homenaje a una obra dedicado a su figura.
A menudo hablamos sobre lo triste y lamentable que resulta que artistas patrios tan grandes como Víctor de la Fuente, José Ortiz o Luis Bermejo, por poner solo unos ejemplos, cuenten con tantos grandes trabajos inéditos en su (nuestro) propio país, pero me atrevería a decir que el caso de Jordi Longarón es el más exagerado, a tenor de su enorme calidad como artista y la prácticamente inexistente obra suya publicada (o al menos disponible) en España.
Precisamente por esto me parece especialmente interesante y necesario este Homenaje a una obra, a la obra de Jordi Longarón i Llopart, grande como pintor, grande como portadista, especialidad donde fue muy reputado, y grande como historietista, a pesar de lo poco que hemos podido ver por aquí de su obra en cómic, al menos del Longarón maduro, que nada le tiene que envidiar a los grandes artistas clásicos norteamericanos... un auténtico genio todavía por descubrir para muchos y el primer dibujante español en dibujar un cómic de prensa americano (Friday Foster), que además fue el primer cómic protagonizado por una mujer afroamericana. Todo un pionero, vaya, además de un maestro de maestros.
A menudo hablamos sobre lo triste y lamentable que resulta que artistas patrios tan grandes como Víctor de la Fuente, José Ortiz o Luis Bermejo, por poner solo unos ejemplos, cuenten con tantos grandes trabajos inéditos en su (nuestro) propio país, pero me atrevería a decir que el caso de Jordi Longarón es el más exagerado, a tenor de su enorme calidad como artista y la prácticamente inexistente obra suya publicada (o al menos disponible) en España.
Precisamente por esto me parece especialmente interesante y necesario este Homenaje a una obra, a la obra de Jordi Longarón i Llopart, grande como pintor, grande como portadista, especialidad donde fue muy reputado, y grande como historietista, a pesar de lo poco que hemos podido ver por aquí de su obra en cómic, al menos del Longarón maduro, que nada le tiene que envidiar a los grandes artistas clásicos norteamericanos... un auténtico genio todavía por descubrir para muchos y el primer dibujante español en dibujar un cómic de prensa americano (Friday Foster), que además fue el primer cómic protagonizado por una mujer afroamericana. Todo un pionero, vaya, además de un maestro de maestros.
JORDI LONGARON
HOMENAJE A UNA OBRA
11 comentarios:
Grandioso Longarón. Se merece muchos homenajes.
Sin duda, uno de los más grandes.
Sin duda, Santiago, y que de una vez se haga justicia con su obra en España.
Saludos.
Totalmente de acuerdo contigo, Kraustex.
Saludos.
¡Merecido homenaje!
Si se combina profesionalidad y talento, pues vemos estos resultados, poco puedo decir de las portadas ya que salta a la vista que son muy buenas y ademas seguro que en muchos casos permanecen en el recuerdo de quienes hemos comprado comics donde Longarón hacía la portada,
no si me confundo con el dato pero yo recuerdo historias suyas tambien en Bruguera, me viene a la memoria en ocasiones comprar un comic en donde publicaban diversos autores e ir directamente a ojear primero las paginas de Longarón...
ademas en muchos casos se vé que pese a dominar su estilo tambien le gustaba experimentar otras lineas o tratamientos de la pagina, en esta que has puesto del oeste recuerda algo a Toppi y he visto en la red unas paginas que hizo creo que para Francia basadas en la novela "Estudio en escarlata" que a mi modo de ver hace un interesante trabajo cercano a la "linea clara".
El entintado de muchas de sus paginas, la planificacion y la clase de sus dibujos hace que hoy sigan teniendo frescura y mucha calidad, a mi por ejemplo cuando hacía policiaco me parecen magnificas sus paginas, he leido en una entrevista que le hicieron donde dice que el destino de un ilustrador es el olvido, y bueno en muchos casos es triste que asi sea, pero por otro lado siempre habrá gente que recordemos y sigamos admirando su brillante trabajo tanto en la ilustración como en los comics...
por cierto ¿sabes si continua pintando?
Saludos.
Hola, Mo. Preparo un artículo sobre Longarón (y otros artistas españoles) para un numero especial decicado a los artistas de la Bardon y su trabajo en Inglaterra para Illustrators próximamente.
Un gran artista, y el primer artista en dibujar una tira en la prensa Americana con un personaje negro como protagonista (y una mujer para ello), por eso en Pilote le propusieron dibujar una serie con un agente negro (aunque creo que duro por un solo episodio).
Es cierto que las últimas muestras sobre el oeste se parece a Toppi. Nunca las habia visto.
Saludos!
Totalmente de acuerdo, Folk, más que merecido.
Desconozco si continúa pintando, no recuerdo haber leído o escuchado nada al respecto.
En principio diría que no hizo nada para Bruguera, tal vez te confundas con otras publicaciones de otras editoriales. La editorial para la cual realizó un mayor volumen de trabajo fue, sin duda, Ediciones Toray.
La calidad de Longarón le permitía dibujar con distintos estilos según el tipo de obra que realizara; incluso por lo que respecta a la ilustración de portadas llegó a usar estilos distintos.
Saludos.
Saludos, Diego.
Habrá que estar muy pendiente de este nuevo número especial de Illustrators... supongo que también aparecerá Víctor de la Fuente.
En cuanto a lo de Toppi, tal vez fuera un homenaje plenamente consciente... lo que sí te puedo decir es que La Historia del Oeste de Longarón fue publicada en las páginas de la revista Hunter, publicada por Riego Ediciones.
Por cierto, en algunas portadas para novelas de género negro, bélico y western se me antoja un poco influido por Robert McGinnis.
Ver estas portadas de retrotrae a mi infancia. Esperaba semanalmente que saliera mi TBO de Hazañas Bélicas en el quiosco. Tenía 10 años y nunca pensé que detrás de aquella obra había un artista. Gracias Jordi.
Saludos, anónimo.
Eso es típico de la infancia. Disfrutar con los tebeos, con los personajes, con las aventuras, sin pensar que detrás de todo ello hay un autor... o varios. Menos mal que cuando crecemos tomamos conciencia de ello y les agradecemos todos los grandes momentos pasados.
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