Nombre: Miguel Ambrosio Zaragoza
Nacido: 29 de Agosto de 1913 en Albuixech (España)
Fallecido: 30 de Septiembre de 1992
Campo: Cómic & magazine europeo
Obras maestras: El Jinete Fantasma / Chispita / El Capitán Trueno / El Corsario de Hierro.
Nacido: 29 de Agosto de 1913 en Albuixech (España)
Fallecido: 30 de Septiembre de 1992
Campo: Cómic & magazine europeo
Obras maestras: El Jinete Fantasma / Chispita / El Capitán Trueno / El Corsario de Hierro.
12 comentarios:
En realidad esta no era la entrada que iba a publicar hoy, pero al enterarme de que justo hoy se cumplen 20 años de la muerte de Ambrós, he cambiado radicalmente de idea...
Esta entrada, como no podía ser de otro modo, va dedicada de forma especial a Jesús Duce.
Buff, que maravillosos recuerdos y que gran autor.
Siempre que se habla de Ambrós o veo alguna de sus maravillosas viñetas se me ponen los pelos como escarpias.
¡Nuestro Kirby!
Gran autor.
Impacientes Saludos.
Saludos, J.A.
Parte muy importante de nuestra cultura popular del S. XX.
Saludos, Francisco.
Un artista nunca suficientemente valorado.
Saludos, Portelillo.
Excelente comparación. Muchos puntos en común...
Impacientes saludos, Pablo.
Muy grande.
Ante todo, muchas gracias por la dedicatoria. Eres muy amable, amigo Mo.
Qué decir de Ambrós, el autor que cambió de forma radical el panorama del tebeo español de aventuras, desarrollando una nueva narrativa gráfica, mucho más dinámica y precisa, con una corporeidad extraordinaria, llena de inercias nunca vistas, encuadres fantásticos y personajes rotundos, atractivos, pendientes de una magia especial que no ha tenido reválida en toda nuestra historieta.
Qué decir de un dibujante que ofrecía los mejores perfiles, las miradas más límpidas y categóricas, los rebumbios más explosivos, las viñetas más contundentes, y las portadas más hermosas.
Qué decir de un autor que si hubiera tenido el tiempo suficiente, los materiales adecuados y el apoyo necesario, hubiera llegado con seguridad a otras cotas, tristemente desconocidas para nosotros.
Bellísimo homenaje a un bello recuerdo de un dibujante que nos dejó la belleza por emblema.
Un abrazo.
Lo primero, felicitar al autor de este blog en general, por la calidad de todos los artículos que nos brinda.
De vez en cuando me doy una vueltecita..., pero voy a tener que pasar de forma más habitual.
Por otro lado, mostrar mi admiración por el gran Ambrós. Para mi gusto el mejor dibujante español de todos los tiempos, en todo el conjunto de su obra.
Cambió la concepción del cuadernillo de aventuras de este país, para siempre.
De acuerdo con lo que se dice por ahí.... Si hubiera tenido los medios necesarios..., y en este país se valorara un poquito más lo propio, hubiera sido una gran figura universal del cómic...., pero..., nunca fue valorado como se mereció...
La historia del cómic le está poniendo poco a poco en su lugar.
Precioso homenaje al maestro de maestros. Os recomiendo que os deleitéis con el conjunto de su obra.
Diego Alatriste
Un par de detalles:
1.- La selección de imágenes es buena, pero hay que señalar que algunas son de la última etapa en la que Ambrós ya había perdido soltura y precisión en las formas. La mejor época de nuestro autor es sin duda la colección original del Capitán Trueno, algunas de sus colaboraciones en los libros de Bruguera, los relatos cortos para la editorial Valenciana y buena parte (pero no todo) del Corsario de Hierro.
2.- La imagen que has puesto del número 1 de la colección original es la de la primera edición; se trata de un número prácticamente imposible de encontrar hoy en día. ¿Dónde has conseguido la imagen?
Saludos, Jesús. De nada, gracias a ti.
Bellas palabras las que le dedicas a Ambrós... Y totalmente justas y merecidas.
1.- La colección original del Capitán Trueno es, sin ninguna duda, su gran obra maestra.
2.- Pues no lo recuerdo, Jesús. Si consigo recordarlo te lo digo...
Un abrazo.
Saludos, Diego Alatriste.
Muchas gracias por tus palabras.
Como bien se ha comentado un poco más arriba, Ambrós es para el tebeo español lo que Jack Kirby para el comic-book USA... Con esto está todo dicho.
Al final, la historia termina poniendo a cada uno en su lugar... Al menos en muchas ocasiones.
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